Cuando nos ofrecen un seguro no siempre sabemos si éste cuenta con las coberturas que se ajustan a nuestras necesidades reales de protección. Así, no sabemos si están nuestros bienes, nuestra persona o nuestros beneficiarios realmente protegidos en el caso de que se presente un siniestro.
Tampoco sabemos qué hay que hacer para considerar todas las posibles causas que pueden dar origen a un siniestro. Para elegir la cobertura que más se ajuste a nuestras necesidades, es recomendable hacer lo siguiente:
INVENTARIO.- Hacer una lista de los bienes que, por sus características, es más probable que sufran un evento desfavorable y seleccionar lo que consideremos pueda generar una fuerte pérdida de carácter económico. Para ello hay que tomar en cuenta que el seguro permite prever las consecuencias económicas de los hechos futuros e inciertos, como dejar protegida económicamente a la familia en caso de nuestro fallecimiento; proteger nuestra casa o negocio en caso de robo, incendio o terremoto o proteger el automóvil y nuestra persona en caso de un accidente.
COSTO.- Determinar cuánto se está dispuesto a gastar en dicho seguro, para lo cual debemos partir de la cobertura básica que ofrece la compañía aseguradora. Ellas tiene opcionalmente diversos beneficios o coberturas adicionales que, obviamente, tendrán un costo adicional que se verá reflejado en el costo del seguro. En el caso de los seguros de vida, por ejemplo, además de la cobertura por fallecimiento, es posible contratar los beneficios por muerte accidental o pérdidas orgánicas; y en el caso de gastos médicos adicionalmente a la cobertura nacional se puede contratar atención médica en el extranjero. Recuerde que influye en el costo el tipo de cobertura, la suma asegurada, el deducible, el coaseguro y hasta el mismo estado de salud del contratante, por mencionar algunos.
COMPARACIÓN.- Ya que se eligió una cobertura, le recomendamos consultar con diferentes empresas de seguros para saber cuál ofrece la mejor opción de acuerdo con las necesidades y posibilidades económicas.