Hoy 1 de junio es el día nacional del donante de órganos. Es un día especial para sensibilizar a la población sobre la importancia y necesidad de la donación de órganos como acto solidario que permite salvar y mejorar la calidad de vida de los pacientes que esperan un trasplante.
El fin de este día es que continúe aumentando las donaciones de órganos tan necesaria para que muchas personas puedan seguir viviendo. La donación es un gesto altruista, considerado como el mayor acto de bondad entre los seres humanos.
En la actualidad hay miles de persones que necesitan de un trasplante para seguir viviendo o mejorar su calidad de vida, todos podemos ser donantes de órganos y Tejidos diciendo que, a nuestro fallecimiento, nuestros órganos sirvan para salvar o mejorar la vida de otros.
Los órganos que se pueden donar son los riñones, el hígado, el intestino, el corazón, el páncreas y los pulmones. También se pueden obtener tejidos, igualmente muy necesarios, como huesos y tendones, las corneas, arterias y válvulas cardiacas.
Según la ley de trasplantes, en España somos considerados donantes si en vida no hemos expresados lo contrario. Sin embargo, en la práctica, siempre se respeta la voluntad de la familia, que debe considerar la donación.
Afortunadamente España tiene la tasa de negativas familiares más bajas del mundo, con apenas un 15%, (de 100 personas , 85 dicen que si)
Debemos ser conscientes de que la donación de órganos y tejidos salva miles de vidas cada año. Cada donante supone una ganancia media de 30 años de vida.
España lleva realizados más de 90.000 trasplantes de órganos y más de 300.000 de tejidos y cerca de 50.000 de progenitores hemopoyeticos (medula ósea y sangre de cordón umbilical) alrededor de medio millón de enfermos se han visto beneficiados por el sistema español de trasplantes.
Con 35,1 donantes por millón de población en 2013, somos líderes mundiales en donación de órganos y trasplantes desde hace 22 años ininterrumpidamente.
Como donar:
- Solicitar el carnet de donante y llevarlo siempre encima junto al resto de la documentación.
- Redactar un testamento vital para regístralo en la consejería de sanidad, explicando que quieres que se haga con los órganos después de fallecer.
- Hablar con la familia para que den su consentimiento.
