Ingredientes
Ingredientes para 6 personas:
- 1,5 kg de mejillones
- 2 cucharadas de aceite
- 1 chalota
- 1 cucharadita de perejil picado
- 100 ml de vino blanco
- 2 cucharadas de coñac
- 1 cucharada de tomate triturado
- 1 cucharada de margarina
- el zumo de 1 limón
- sal y pimienta al gusto
- pan para acompañar el plato (opcional)
Preparación
Hoy vamos a darnos un gusto yendo a la pescadería y comprando unos mejillones frescos para el primer plato. Por lo general, los mejillones se encuentran a muy buen precio, por lo que son una de las formas más baratas de disfrutar de todo el sabor del mar. Una de las formas más populares de comerlos es a la marinera, pero hoy nos decantaremos por una cocción que, como su nombre indica, proviene de la ciudad francesa de Burdeos: mejillones a la bordelesa.
Empezad por limpiar a conciencia los mejillones bajo el chorro de agua fría. Rascad la superficie con un cuchillo para eliminar la posible suciedad que tengan adherida y aseguraos de que estén bien cerrados: desechad los abiertos porque podrían estar en mal estado. Quitad también los filamentos, que el animal utiliza para adherirse a las rocas.
Picad la chalota bien fina y metedla en la cubeta. Añadid el vino blanco, el aceite, el tomate triturado, la margarina, el coñac, el perejil y el zumo de limón. Removed a conciencia todos los ingredientes para ayudar a que se cuezan bien, y luego salpimentad a vuestro gusto. Por último, verted los mejillones y programad el menú guiso 10 minutos con la tapa abierta. Recordad que para cocinar con la tapa abierta es necesario girar el pomo de la tapa hasta la posición ‘cerrado’, o de lo contrario la máquina no se pondrá en marcha.
Durante la cocción, los mejillones se tienen que abrir. Los que no lo hayan hecho deben ser retirados del plato, ya que indica que el animal estaba muerto antes de ser recogido, y por tanto podría estar en mal estado. Servid el plato recién hecho y acompañado de vino blanco y pan, ¡porque seguro que alguien querrá rebañar la salsa!
