Te lo explicamos con detalle:
- Beneficios para la salud. La cloración salina ofrece un agua de mayor calidad que no produce el típico escozor en los ojos ni desgaste en la piel. Al ser un agua que funciona con sal, tiene un riesgo nulo de intoxicación.
- Beneficios medioambientales. Obviamente no es lo mismo un sistema que funciona a base de productos químicos que otro que solo necesita sal y que va reciclando el agua. Es mucho más respetuoso con el medioambiente.
- Beneficios de carácter económico. La piscina de agua salada requiere una inversión inicial potente pero que pronto será recuperada con el ahorro en productos químicos. También exige un consumo eléctrico asequible equivalente al de una bombilla eléctrica.