Si cada vez que te bañas y te cepillas el cabello notas que se te caen más y más cabellos, seguramente comienzas a preocuparte y es momento de hacer algo al respecto. Aunque un especialista es la persona indicada para darte el mejor tratamiento, algunos malos hábitos y errores pueden estar contribuyendo a que tus mechas se debiliten y se caigan, ¡conoce cuáles son!
Jalar tus mechas al peinarlas
Los peinados recogidos, como colas de caballo, chongos y trenzas delgadas, pueden estar debilitando tus mechas y provocando su caída. Evita usar estos peinados, prefiere dejar tu cabello suelto o un poco flojo cuando lo recojas.
Cepillar el cabello en exceso
Cepillar mucho y agresivamente las mechas las deja débiles y propensas a la caída. Prefiere los cepillos suaves y con cerdas naturales, que no maltratan al cabello, y comienza cepillando las puntas y termina con la raíz.
No darle suficientes nutrientes al cabello
El cabello debe nutrirse desde el interior, por eso procura tener una alimentación balanceada rica en proteínas, ácidos grasos, vitaminas y minerales. Los suplementos alimenticios también son una buena opción porque aportarle vitaminas y minerales, además de que existen productos para el cabello que los contienen y que ayudan a que el cabello crezca más fuerte y sano.
No lavar correctamente las mechas
Invierte en un shampoo rico en vitaminas, minerales y con arginina, que va a nutrir mejor tu cabello. Al aplicarlo da un masaje en las raíces para que penetre mejor y para estimular el cuero cabelludo, esto que influye en el crecimiento del cabello.
Realizar tratamientos capilares agresivos
Los alisados, las relajaciones, las decoloraciones y las coloraciones dejan el cabello frágil, seco y quebradizo. También el uso de líneas para el cabello con ingredientes muy agresivos, y la utilización frecuente de aparatos que requieren de calor para estilizar las mechas, como la secadora y la plancha, contribuyen a que se dañe la estructura del cabello y se debilte.
Olvidar la utilización del acondicionador
El acondicionador es un producto indispensable porque llena los huecos de la fibra capilar y garantiza que las mechas queden más fuertes, además hace que el cepillado sea más fácil de realizar y menos agresivo.
Vivir con demasiado estrés
El cabello también se puede caer por estrés, realiza actividades que te ayuden a relajarte, como meditar o hacer ejercicio, y trata de no preocuparte demasiado por cuestiones laborales y personales.
Frotar con fuerza la melena al secarla
Trata de secar tu cabello de forma suave, envuélvelo en una toalla de microfibra y frótalo delicadamente, ya que si lo agitas con fuerza es más fácil que se formen nudos, se debilite y se caiga.
Dormir con el cabello mojado
Cuando las mechas están mojadas son más frágiles y por lo tanto no es recomendable ni cepillarlas, ni amarrarlas, ni dormir con ellas en ese estado, ya que así son más propensas al quiebre y a la caída.
Usar tratamientos caseros y recomendados por amigas
Si notas que el problema cada vez se vuelve más grave, lo mejor es ir con un especialista que estudie tu caso particular. Los tratamientos caseros generalmente no son la solución, e inclusive pueden empeorar el problema de caída de cabello.