Cuando hablamos de suplementación, hablar de las proteínas es casi una obligación. Este tipo de complementos suele levantar bastante escepticismo, esto ocurre casi siempre por desinformación, de tal manera que muchas veces se llega a confundir con otro tipo de productos.
Los suplementos a base de proteínas e hidratos de carbono cumplen varios objetivos, bien sea como complemento de una dieta ( por ejemplo dieta vegetariana ), o como sustituto de comidas o finalmente una función recuperadora posterior al entrenamiento.
Las proteínas son macromoléculas compuestas por carbono, hidrógeno, oxígeno y nitrógeno. La mayoría también contiene azufre y fósforo. Son compuestos muy complejos formados por cadenas de cientos y miles de aminoácidos unidos entre sí por enlaces peptídicos.
Es un error pensar que sólo sirven para aumentar masa muscular ejercen muchas más funciones. Se caracterizan por tener entre otras, funciones reguladoras, defensivas y en algunos casos energética. Tienen un papel en la contracción muscular ya que esta se realiza a través de la miosina y actina, proteínas contráctiles que permiten el movimiento celular.
Al no poder ser reemplazadas por los carbohidratos, ni por las grasas por no contener nitrógeno cobran aún mayor importancia. Pero la principal función de la proteína en nuestro organismo es la plástica, con lo cuál contribuye en gran medida a la regeneración de los tejidos.
Existe un periodo corto durante el cual nuestro cuerpo entra en una fase en la que esta predispuesto a asimilar mejor estos nutrientes que tiene lugar durante los 30- 60 minutos posteriores al entrenamiento de fuerza.
En esos instantes necesitamos nutrientes que se asimilen de forma rápida, fácil y mejor líquidos, puesto que pretendemos que no se paren demasiado en nuestro estomago.
En la actualidad existen muchas proteínas líquidas que vienen preparadas para este fin. Si pretendes maximizar tu recuperación te recomiendo que elijas una proteína que contenga un pequeño porcentaje de carbohidratos, esto también ayuda a que la asimiles mejor.
Se sabe que las necesidades de este nutriente varían en determinadas situaciones de la vida. Por ejemplo las necesidades de este nutriente aumentan entre los deportistas así como cuando se acaba de pasar por una enfermedad ó lesión grave. De la misma forma varía los requerimientos entre un adulto y un niño.
La proteína líquida se puede tomar en varios momentos del día pero el mejor momento sin duda es después del entrenamiento de fuerza.
Unas de las cuestiones más relevantes sobre este tema es el valor biológico (VB). Normalmente, debido a la falta de conocimiento sobre esta materia el cliente se preocupa por la concentración proteica por cada 100 gramos de producto pensando que esto es un sinónimo de su calidad. Nada más lejos. El VB se determina por el coeficiente entre el nitrógeno absorbido y retenido y el absorbido en el tracto intestinal.
Si hablamos de alimentos sólidos ricos en proteína, debemos tener en cuenta que los de mayor valor biológico son las proteínas de origen animal, como pueden ser las carnes, pescados, huevos y lácteos.
