Gestiona tu estrés con cuatro trucos

Must Try

El estrés y el miedo son dos términos que pueden parecer similares, pero ambos se diferencian porque el miedo se crea ante una situación de peligro real mientras que el estrés es tu percepción o idea de que algo negativo puede ocurrir.

Normalmente, creemos que otras personas nos pueden ser de ayuda, pero su ayuda puede incrementar nuestro estrés. Empatizar con una persona que vive una situación de estrés es muy complejo, debido a que cada persona vive esta sensación de una forma subjetiva.

Es muy probable que estos días estéis sintiendo este tipo de sensaciones a cuenta del confinamiento, del tiempo que disponemos para reflexionar sobre nosotros o bien por pensar sobre el futuro, entre otras cosas. Si te has sentido de esta manera, no te preocupes, el ser humano por naturaleza debe de convivir con el estrés. Es más, un buen nivel de estrés, conocido como Eutres, ayuda en la concentración hacia nuestras tareas con una mayor lucidez y rapidez.

Hay dos puntos donde se debe de trabajar la gestión del estrés. Primero, cuando no se tiene ninguna sensación de la misma, ya que estás excesivamente relajado y no eres realmente eficiente. Por otro lado, el exceso de estrés también es perjudicial y acompaña a situaciones de bloqueo, quedarse en blanco, sudores dada la situación o tartamudeos en conversaciones.

Existen diferentes perfiles de personas más propensos a sufrir de estrés:

  1. Las personas que quieren tener controlado todo su entorno tienden a ser vulnerables a sufrir estrés.
  2. Trabajadores que cuando se enfrentan a una situación de bloqueo, en la cual necesitan de un nuevo aprendizaje, piensan que su desarrollo es limitado y no pueden avanzar.
  3. Perfiles que no son capaces de gestionar correctamente sus tiempos y trabajan sin un objetivo ni una metodología clara en su día a día.

En el entorno laboral, el estrés surge a menudo a cuenta de la sobrecarga de trabajo o presión que se emite desde la empresa. Ante esta situación, puede que se pueda sentir bloqueo y dificultades para solucionar el reto, quizá problemas de gestión de tiempos o al ser una situación no controlada se llegue a una sensación de estrés.

El estudio de Cinfa sobre “Percepción y hábitos de la población española en torno al estrés” muestra que en 2017 casi 12 millones y medio de personas sufren diariamente estrés a cuenta de su vida laboral. Las consecuencias del estrés pueden desarrollar conductas nocivas para la salud como fumar, comer o beber en exceso con el objetivo de tratar de aliviar el descontrol emocional de la situación. Asimismo, la persona puede sentir la incapacidad para desconectar afectando a su vida personal y a su tiempo de ocio.

No todo es negativo y es que a diferencia de muchas otras situaciones esta se puede superar y cambiar. Los hábitos y pensamientos son los que llevan a estas situaciones. Si se hace uso de nuestra energía para apreciar los retos que surgen durante nuestras vidas, en vez de convertirlo en estrés, verlo como una posibilidad para aprender y desarrollarte. De esta forma, los niveles de estrés disminuirían.

No obstante, comprendemos que el cambio de pensamiento es un gran reto, Es por ello que os vamos a facilitar cuatro ejercicios que podéis usar en cualquier situación de estrés:

1. TIRAR LAS PATATAS

Os preguntaréis, ¿Por qué ese nombre? Da el caso que el 7 de diciembre de 1941, cuando Pearl Harbour fue atacada por el ejército japonés, algunos de los habitantes y militares de este lugar decidieron contraatacar con armas, pero también lanzando patatas y cualquier cosa que pudieran lanzar. Mientras tanto, otra gran parte de la población se escondió debajo de sus camas.

Tras este ataque se realizó un estudio sociológico donde se pudo ver que las personas que actuaron lanzando cualquier utensilio a los aviones (a pesar de no hacer ningún efecto) mantuvieron una salud mental mejor que los que se escondieron.

Dicho estudio, nos ayuda a entender que puede ser inteligente actuar rápido y sin pensar mucho cuando vemos venir una situación de estrés hacia nosotros.

2. DEJAR DE COMENTARLO

Esto es un asunto muy común en nuestra cultura. Tendemos a tratar los temas negativos con asiduidad y facilidad y olvidándonos de lo positivo. Es probable que tu no seas una de esas personas que cuando sufre de estrés a causa de una razón la cuenta una y otra vez, pero en caso de que lo seas…

¡DEJA DE PERDER ENERGÍA!

Es hora de ser eficiente y no quitarte energía para aumentar el problema y coja aún más fuerza. Repetir el problema una y otra vez no significa que tenga más importancia, sino que corremos el riesgo de convertirnos en la “oveja negra” del rebaño al saturar a las personas que nos rodean con la misma temática una y otra vez.

3. TÉCNICA DE HULK

Esta técnica sirve para bajar de una forma rápida los niveles de estrés. Se trata de un ejercicio que puedes practicarlo antes de superar o presentarte ante ese reto que te incomoda.

Consiste en estirar durante 60 segundos todos y cada uno de los músculos que tienes en el cuerpo. El objetivo de este ejercicio es soltar toda la adrenalina que tienes acumulada en el cuerpo a raíz del estrés.

4. LOS 4 ELEMENTOS

En el momento que se vive una crisis de estrés es muy difícil poder controlarlo, es por ello que la respiración es una de las acciones que más nos puede ayudar a que esas situaciones sean más llevaderas.

Los 4 elementos hacen referencia a los siguientes pasos:

  • AGUA: Para situaciones de estrés leve. Inspirar lento por la nariz y expira lento por la boca mientras visualizar que el aire que te entra es blanco (aire limpio) y el que sale es negro (aire sucio)
  • TIERRA: En situaciones de shock como un accidente. Inspira lento por la nariz y expira rápido el aire por la boca.
  • FUEGO: En conversaciones tensas para contenerte. Inspira rápido por la nariz y expira fuerte por la boca.
  • AIRE: En situaciones de pánico y casos extremos como un atentado. Inspira rápido por la boca y expira rápido por la boca.

Son muchas las situaciones donde puedes usar este tipo de trucos, en una charla o ponencia delante de un publico, una entrevista de trabajo o exponer un proyecto delante de los cargos superiores o un inversor son unos pocos ejemplos.

En conclusión, el estrés es un síntoma natural en el ser humano. El truco está en saber llevarlo de una forma correcta e inteligente. Como hemos podido observar, existen dinámicas que ayudan a gestionar dicho sentimiento, sólo requiere aplicarlas en tu día a día.

Latest Recipes